el cerebro del equipo. Un futbolista que gobierna el terreno de juego, marcando el compás y dominando el desafío. Su mirada es penetrante, capaz de descifrar las intenciones del contrincante y prever sus maniobras. Con virtuosismo, emplea sus aptitudes para orquestar el devenir del enfrentamiento. Su mera presencia electriza a sus compañeros,